La posibilidad de aplazar el pago del IVA es un beneficio pensado para ayudar a la capitalización de pymes y autónomos, que en ocasiones pueden verse obligados a pagar el impuesto por su facturación antes de haber recibido el pago.
Hacienda da la posibilidad de aplazar deudas hasta de 18.000 euros sin aval con intereses de 3,5%. Para las cifras superiores los intereses ascienden al 4,37% y hay que presentar algún tipo de garantía, como aval bancario, garantía hipotecaria o seguro de caución.
Requisitos para el aplazamiento del IVA
Los requisitos para solicitar este beneficio son:
- Puede solicitarlo cualquier persona, física o jurídica.
- Es necesario estar al día en los pagos a la administración, es decir, no tener ninguna deuda generada por impago de IVA o IRPF.
- El impuesto sobre el que se pedirá el aplazamiento debe seguir en vigor.
- De hacerse en el periodo voluntario, la solicitud debe entregarse acompañada del modelo de autoliquidación.
- En caso de solicitarse en periodo ejecutivo, es decir ya que ha comenzado a generar deuda, se deberá pagar un recargo que será, como mínimo de 5%.
- Que se trate de un problema puntual, ya que en la solicitud se preguntarán por las causas y debe tratarse de un problema de liquidez transitorio demostrable, por lo que debes tener a la mano tus facturas y albaranes.
- Demostrar que la empresa o persona es solvente, es decir que, pese a los problemas transitorios, tiene la capacidad para generar los recursos necesarios para salvar la deuda en el periodo establecido.
Tipos de aplazamiento del IVA
Además de estos requisitos es fundamental tener en claro el tipo de aplazamiento que se desea solicitar:
- Total, por el 100% de la deuda.
- Parcial, si pagamos una parte y aplazamos el resto.
- Puro, cuando se pospone el total del pago por tres meses.
- Fraccionado, si decides pagarlo en cinco plazos iguales distribuidos en tres meses.
Medios de solicitud
La solicitud en nombre de una empresa debe presentarse vía telemática, para lo que es importante contar con facturas online que te ayuden a explicar los motivos del aplazamiento.
Las personas físicas pueden hacerlo vía online o presencial, rellenando un impreso de solicitud o a través de un escrito en que el que se especifique el impuesto para el que se solicita, el importe a aplazar, las causas y los plazos y condiciones en que se abonará la deuda.
Aunque siempre es mejor estar al corriente con los impuestos, aplazar el pago puede ser una buena estrategia de gestión para sanear la contabilidad de una empresa, ya que es mejor prevenir generando una deuda que lamentar pagando sanciones.