Temporada 1: Cómo encontrar y retener a los mejores

Pilar Jericó Escritora, conferenciante y presidenta de la consultora Be Up

Cómo motivar a las personas: El triángulo del oro del liderazgo

Descubre cómo puede un buen líder motivar a las personas para que sean más felices y den lo mejor de sí mismas.

  • Los jefes son responsables de la consecución de los objetivos, del ambiente de trabajo y de lo felices o no que vayamos a trabajar.
  • La buena noticia es que las capacidades de liderazgo se pueden ejercitar. Te contamos las claves para aprender a motivar a las personas.

Los buenos líderes no son perfectos, aunque cuentan con algunas características que hacen que todo el mundo quiera seguirlos. Después de investigar durante años, he llegado a la conclusión de que los buenos jefes que ayudan a alcanzar los resultados y a construir compromiso, tienen una serie de actitudes. Me gusta representarlo en un triángulo al que podemos denominar ‘triángulo de oro’ del liderazgo.

¿Qué es el triángulo de oro del liderazgo?

El triángulo del oro del liderazgo recoge las actitudes necesarias para convertirse en un buen líder. Y es que los buenos líderes, además de atraer el talento, elevar la motivación e incentivar la permanencia de sus equipos, son los responsables de reforzar el compromiso de los profesionales y alcanzar los objetivos marcados. ¿Cómo lo hacen?

Definen el objetivo

Evidentemente, todas las empresas tienen objetivos, pero no estamos hablando de objetivos de negocio. Nos referimos a dar propósito y sentido al trabajo. Los empleados tienen que saber que trabajan para algo más allá, que contribuyen a una función más amplia.

Según un estudio de la Universidad de Michigan, cuando una persona entiende para qué trabaja, se despierta una parte de su cerebro. Concretamente, la corteza prefrontal ventromedial. Esta parte del cerebro es la que neutraliza el miedo, la que te permite encontrar cuáles son las prioridades de tu vida.

Por lo tanto, un buen jefe se encarga de marcar estos objetivos, compartir las expectativas que existen sobre sí mismo y dar sentido al trabajo que se realiza.

Hacen que te sientas útil

A las personas no solo nos gusta estar en entornos de trabajo amables y controlados, porque terminamos aburriéndonos. Necesitamos afrontar nuevos retos, desarrollarnos y encontrar desafíos que despierten nuestro talento. Si queremos liderar y contar con los mejores profesionales, debemos saber cómo crear desafíos.

Un buen líder conoce el talento de cada uno de los miembros del equipo y les ayuda a desarrollarlo. Para conseguirlo es importante contar con una actitud observadora y la inteligencia emocional necesaria para conocer mejor a las personas.

Hacen que te sientas importante

Las personas necesitan sentirse relevantes en las organizaciones. Para sentirnos importantes necesitamos contar con seguridad psicológica. Es decir, sentir que en nuestra empresa podemos hablar con claridad, que se pueden comprender los errores. La empresa Spotify, por ejemplo, publica el muro del error, donde sus empleados pueden compartir sus equivocaciones como parte de su proceso de aprendizaje.

Liderar es conversar con nuestros equipos de forma activa. Los líderes deben escuchar, estar presentes de manera consciente. Dentro de este apartado está también la gestión de la diversidad. Sentirse importante pasa por poner en valor la diferencia y lo que cada persona aporta desde sus fortalezas, experiencias y maneras de ser.

Dan ejemplo

Si quiero fomentar en mis equipos el aprendizaje, la escucha, el propósito… tengo que empezar por mí mismo. No hay posibilidad de liderar equipos si no empezamos dando ejemplo.

Más consejos para motivar a las personas

Partiendo del hecho de que el reconocimiento es la técnica fundamental para motivar a las personas, a continuación, te doy unos consejos para reconocer el trabajo de tus empleados, hacerlos sentirse útiles e importantes.

1. El reconocimiento debe ser sincero

No hay mayor motivación que la sinceridad y sentir que el líder de equipo o de la empresa es honesto. En este punto no sirven las frases genéricas del tipo: “En la empresa somos todos muy buenos”.

El mensaje que realmente motiva a las personas es aquel que se dirige directamente a alguien en concreto, que habla de hechos y aporta datos que hacen entender que uno ha realizado realmente un gran trabajo.

2. El reconocimiento debe ser tanto individual como de equipo

Habrá ocasiones en las que sea necesario destacar a una persona en concreto de la plantilla, pero también hay que tener presente que el buen hacer de un equipo de trabajo también consigue resultados magníficos, por lo que, en ciertas ocasiones, será importante extender el reconocimiento a todo el equipo.

3. El reconocimiento no debe ser continuo

Reconocer el trabajo realizado ayuda a motivar a los empleados, pero, ojo, este reconocimiento no puede ser diario. El reconocimiento debe ser frecuente cuando es oportuno, pero si se hace diariamente, el cerebro se acostumbra, por lo que no surtirá el mismo efecto.

4. Valorar más allá de los resultados

Conseguir buenos resultados es el objetivo de toda empresa, sin embargo, se pueden reconocer otras cuestiones asociadas al trabajo más allá de los resultados. Por ejemplo, el compañerismo, la forma de buscar soluciones, el esfuerzo realizado… Así es como un líder motiva a sus empleados, independientemente de que hayan conseguido o no los objetivos que se perseguían.

En definitiva, no hay ningún líder ni empresa perfectos, pero lo interesante es saber aprender y rodearse de personas que nos ayuden a ser conscientes de cómo lo estamos haciendo para seguir mejorando.

Es esencial tener claro cuáles son los valores, el propósito y luchar por ellos, sobre todo, en los momentos difíciles. Los tiempos de crisis e incertidumbre son una invitación a los líderes a dar lo mejor de sí mismos y de ayudar a sus equipos a conseguirlo.