Formación Online (III): Recursos que aporta Internet al aprendizaje de idiomas
Conocer cómo comunicarse en otros idiomas o, al menos, saber lo suficiente para entenderse en una sencilla conversación, es algo básico para muchos de los profesionales. Pero, por desgracia, no siempre se dispone de la disponibilidad horaria y geográfica para poder realizar cursos intensivos sobre un determinado lenguaje.
Aquí es donde entra en juego Internet. No sólo por la posibilidad de hacer estos cursos a distancia (algo que ya comentábamos la semana en la parte de este especial dedicada al e-learning y que puede verse aplicado a los idiomas con iniciativas como That’s English), sino también por todos los recursos a los que se puede acceder a través de la red.
La evolución de los recursos tradicionales
En Internet pueden encontrarse miles de cursos sobre los principales idiomas del mundo. No sólo hablamos de páginas que ofrecen cursos dentro de varias categorías (por ejemplo, Aula Fácil o eMagister), sino que también existen academias, instituciones y hasta usuarios particulares que ponen a disposición de todos de usuarios materiales muy valiosos para aprender la gramática, el vocabulario, la pronunciación y otros elementos característicos de un determinado idioma.
Son muchas las instituciones que ofrecen materiales y cursos de varios tipos en la red como complemento a su formación offline o tradicional. Por ejemplo, Cambridge ofrece una gran variedad de diccionarios de manera gratuita. Sin embargo, quizás uno de los diccionarios más utilizados por su gran cantidad de idiomas es WordReference, que además dispone de diversas extensiones y aplicaciones móviles para hacer más fácil su uso.
Si pasamos a hablar de material más complejo, BBC, curiosamente, no sólo tiene un apartado dedicado a la enseñanza del inglés sino que también ofrece recursos en muchos otros idiomas: francés, italiano, chino, etc. No es el único ejemplo de cadena de televisión que permite a los internautas de todo el mundo aprender el idioma local. En Alemania, por ejemplo, la Deutsche Welle dispone de un completo y muy bien estructurado curso de alemán, de varios niveles y que contiene numerosos recursos multimedia. En España, RTVE intentó hacer algo similar pero no llegó a triunfar.
En todos estos casos, los cursos tienen la ventaja de poder ser interactivos: suelen ser acompañados de audios, de vídeos y otros juegos y recursos que se pueden utilizar gracias a las propias características de la red. Es una de las grandes ventajas de los cursos a través de Internet, y es que ya no es necesario asistir a una clase para ver un clip o escuchar una conversación grabada.
Acceso casi sin límites a material online
Pero la importancia de Internet a la hora de aprender idiomas aún va mucho más allá. Antiguamente, era necesario acudir a las bibliotecas públicas y otros lugares si se deseaba tener acceso a material original en otro idioma. Hoy, por suerte, todo eso queda a un simple click del ratón y, en la mayoría de casos, sin coste alguno para el usuario.
Periódicos, webs de noticias, vídeos de cadenas de televisión… los recursos a disposición del alumno para que éste practique y coja soltura son casi infinitos. Podemos leer el periódico The New York Times del día si queremos practicar la lectura del inglés o ver algunos programas o vídeos recientes de la cadena RTL si deseamos mejorar nuestra comprensión del alemán.
Cursos sociales
Y una vez tienes clara la teoría, ¿cómo puedes utilizar y conversar en otro idioma? Aquí es donde entran algunos portales educativos sociales que no sólo ofrecen juegos, ejercicios y otros desafíos, sino que además permiten que los usuarios se comuniquen entre sí y puedan practicar, en tiempo real, lo que han aprendido.
Babbel, Livemocha y Busuu son tres ejemplos de esto mismo, aunque hay muchos más. Si esta modalidad se hace algo pesada, otra alternativa es la que ofrece Palabea, que permite a los usuarios participar en conversaciones en otros idiomas sobre temas que les sean de mutuo interés.
Aprende desde cualquier parte
Pero ¿se puede aprovechar los ratos libres que se tienen en el trabajo, en el transporte público o simplemente cuando estás descansando desde tu casa? Gracias a las numerosas aplicaciones que existen para aprender idiomas desde teléfonos móviles, la respuesta a esta pregunta es sí.
Babbel, uno de los sitios que mencionábamos antes, dispone de completas apps en iTunes y en Google Play, y lo mismo ocurre con la mayoría de portales sociales como los que hemos incluido aquí. Una simple búsqueda en las distintas tiendas nos devolverá cientos de alternativas, para que podamos escoger la que más se adapte a nuestras necesidades.