Los grandes equipos generan armonía y felicidad 

Traer a grandes personas es una cosa. Pero, ¿cómo hacer que permanezcan a largo plazo? ¿Cómo hacer que sientan que su futuro está en tu empresa?  

En muchos sentidos, los valores de la empresa que inicialmente atrajeron a alguien a ti ―igualdad, bondad, generosidad, por ejemplo― son los que harán que quieran quedarse. Así que asegúrate de que esos valores se mantienen y se defienden todos los días.  

Seamos sinceros, si su relación con la empresa resulta ser puramente transaccional («Esto es lo que esperamos de ti, esto es lo que te pagamos a cambio»), no puedes esperar que quieran quedarse. La verdad es que las personas con más talento buscan empresas con una cultura sólida y valores centrados en las personas. Un lugar donde ellos, como individuos, se sientan apoyados y valorados. Si queda claro que no es así, pronto seguirán su camino. 

Crea sistemas para el éxito 

¿Cómo puedes lograrlo? Los pequeños gestos dan mucho de sí. Dar las gracias, reconocer el talento y la tenacidad de las personas, asimismo, es fundamental reconocer el tiempo que dedican cada día al trabajo. Pero no basta con la buena voluntad y las intenciones positivas. Hay que aplicar un enfoque más estratégico. Ofrece programas de desarrollo personal y profesional, y actividades de creación de equipos. Si un miembro de tu equipo es sociable y un líder natural, ¿por qué no le das la oportunidad de organizar un calendario de eventos internos? Les ayudará a sentirse reconocidos y capacitados, y todos se beneficiarán.     

Los hechos hablan más que las palabras. Iniciativas como esta demuestran que vas en serio y que te preocupas por el crecimiento personal y profesional de tu equipo.  

Planifica el viaje 

Ten en cuenta las necesidades del individuo a la hora de enfocar la incorporación, tu compromiso con las evaluaciones y las actividades de los equipos. Piensa en cómo es el recorrido de un empleado feliz y comprometido. ¿Qué pueden necesitar de ti para lograrlo? Utiliza estas ideas e información como premisa de tu planificación y crea programas y procesos en torno a ellas. 

Soy directora de personal de TRU Colors, una empresa emergente con ánimo de lucro centrada en las personas con sede en Wilmington, Carolina del Norte, cuya labor social consiste en unir a rivales de las bandas y fomentar la comunidad. Durante nuestro extenso programa de incorporación, proporcionamos formación; damos tiempo a las personas para que investiguen más sobre lo que han aprendido; les ofrecemos la oportunidad de presentar sus conclusiones, antes de reforzar sus aprendizajes con una experiencia «más allá de la manzana». Es decir, les ponemos en un departamento diferente para ver si pueden aplicar lo que han aprendido. Esto les da un sentido de pertenencia, les da confianza y aúna a los nuevos. 

Invertir en las personas es rentable 

Recuerda que cuesta más contratar gente que mantenerla. Así que hazles saber que cuentan; es una inversión. Demuéstrales que te importan; esto va más allá de su «trabajo». También se trata de la forma en que se tratan las situaciones personales en la empresa. Puede ser que alguien tenga dificultades con una discapacidad o un problema de salud y necesite tiempo libre, o que la familia de un miembro del equipo requiera apoyo de emergencia. La forma en que tu empresa responda en esos momentos contribuirá en gran medida a mantener a tus mejores empleados. Si tus políticas se basan en la bondad y la compasión, tus acciones serán recordadas. Así que estate ahí para ellos.