Asesorías y Despachos Profesionales

Asesorías y despachos profesionales, ¿cuáles son las diferencias?

Descubre las principales diferencias entre asesorías y despachos profesionales. ¿Por qué necesita mi empresa un asesor?

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Las principales diferencias entre asesorías y despachos profesionales son que la asesoría presta ayuda en materia de gestión o de resolución de problemas a largo plazo y el despacho profesional está más enfocado a cuestiones puntuales.

  • El asesoramiento empresarial se utiliza para cuestiones más a largo plazo. Aunque en ambos casos ayudan al empresario a resolver problemas y a encontrar oportunidades de negocio.
  • En este post te explicamos las diferencias entre asesorías y despachos profesionales y te explicamos cómo pueden ayudarte en tu empresa.

¡TUITEALO! Asesoría o Despacho profesional. ¿Sabes en qué se diferencian? Descubre cuál de los dos servicios es el que mejor se adapta a las necesidades de tu empresa.

Cada vez son más las sociedades que se ven obligadas a recurrir a los servicios de asesoramiento y consultoría externa. Ya sea con el fin de cumplir los objetivos marcados y conseguir el crecimiento deseado o para resolver algún problema que haya podido ocurrir durante la actividad empresarial.

La asesoría y consultoría para empresas hace referencia a unos servicios subcontratados por las empresas para recibir asesoramiento y ayuda de profesionales altamente capacitados. Todo ello con el objetivo de mejorar aspectos como la gestión, el análisis o la resolución de problemas que puedan surgir en la empresa.

Aunque en un principio puede parecer que ofrecen servicios muy similares, lo cierto es que existen algunas diferencias entre asesoría y despachos profesionales que debes conocer. De modo que puedas saber cuál de los dos servicios es el que mejor se adapta a lo que tu empresa necesita.

Diferencias entre asesorías y despachos profesionales

Si tuviéramos que hacer un resumen rápido de la diferencia entre asesoría y despachos profesionales para empresas, diríamos que el asesoramiento se utiliza para cuestiones permanentes a largo plazo, sirviendo de apoyo a la empresa durante un periodo de tiempo, mientras que cuando se recurre a los servicios de despachos profesionales es más para cuestiones concretas y específicas.

En ambos casos tratan de ayudar a una empresa a alcanzar sus objetivos de la siguiente manera:

  • Ayudan a descubrir y resolver posibles problemas de gestión y de negocio.
  • Identifican y evalúan nuevas oportunidades de negocio.
  • Ofrecen formación y mejoran el aprendizaje.
  • Implementan los cambios propuestos.

¿Por qué necesita mi empresa un asesor?

Un asesor es un profesional con amplios conocimientos a nivel jurídico, administrativo, fiscal y contable. Su función principal es la de asesorar a empresas, negocios o autónomos, ayudándoles a analizar sus cuentas y evaluar la marcha de su negocio.

Al contratar los servicios de una asesoría de empresas, el asesor se encargará de preparar los documentos fiscales y contables del negocio y presentarlos a la Administración. Además de analizar las cuentas y tomar medidas para favorecer el crecimiento de la empresa.

Otra de las funciones de un asesor puede ser la de supervisar y analizar la organización constantemente, con el fin de prevenir posibles situaciones de riesgo en la empresa.

La figura de un asesor es clave para el buen funcionamiento de una empresa, teniendo la garantía de que se adaptará y cumplirá en todo momento con la legislación vigente.

¿Escojo una asesoría profesional o un despacho?

Una vez conocidas las diferencias entre asesorías y despachos profesionales, es el momento de decidir qué servicio se adapta mejor a las necesidades de tu negocio.

Si lo que quieres es contar con profesionales que te ayuden a hacer crecer tu negocio, necesitas una asesoría para empresas. Esta te ayudará a prevenir situaciones y a supervisar tus cuentas, así como asegurar el bienestar y el crecimiento de tu negocio.

Con una asesoría tendrás la tranquilidad de saber que toda la información de tu empresa estará supervisada por un profesional. Será el que se encargará de que cumplas con la legislación vigente. Además, te ofrecerá datos para que puedas conocer la situación de tu empresa en todo momento, así como previsiones de futuro para evitar posibles sorpresas.

Si, por el contrario, lo que necesitas es poner remedio a un problema existente, en tiempo y forma, necesitas recurrir a un despacho profesional. Será el que se encargue de analizar la situación actual de tu negocio y te ofrezca las pautas para que puedas solucionar dicho problema.

La tarea de ambos, asesor y despacho profesional, es de suma importancia para la empresa. De hecho, son servicios que, si se complementan, supondrán un gran alivio para el cliente. Hay que tener en cuenta también que en los últimos años el despacho profesional se ha reinventado y se ha adaptado a las nuevas tecnologías para aportar al cliente nuevos servicios de acuerdo con sus necesidades.

De hecho, no es raro que la mayoría de los despachos profesionales ofrezcan en la actualidad servicios complementarios similares a los que proveen ya las asesorías como:

  • Asesoramiento en la creación de nuevas empresas.
  • Servicios de Recursos Humanos.
  • Asesoramiento en materia de protección de datos.
  • Gestión de insolvencia del negocio.
  • Etc.

Así que, aunque a priori las diferencias entre asesorías y despachos profesionales no sean demasiadas, es posible que con el paso del tiempo la delgada línea que las separa sea aún mucho más débil.