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Las sorpresas que en 2017 puede dar Hacienda a autónomos y pymes

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En los últimos días vamos conociendo nuevos detalles de los planes de Hacienda para el futuro. El ministerio plantea matizar algunas de las reformas ya tomadas y desarrollar nuevas medidas. Aún no conocemos todos los detalles, entre ellos el calendario con el que se llevarían a cabo. Algunas ya están en marcha, como las modificaciones de los aplazamientos, pero debemos conocer los detalles de cómo se desarrollarán en el futuro. En otros casos, como la rebaja del IRPF, es pronto para saber cuándo se producirá.

Algunas de esas decisiones tendrán un impacto relevante sobre pymes y autónomos. Éstas son tres destacadas orientaciones dentro de los planes de Hacienda.

La rebaja del IRPF

A tenor de lo que Cristóbal Montoro confirmó en su comparecencia del día 19 de enero en la Comisión de Hacienda y Función Pública del Senado, parece que una rebaja del IRPF forma parte de los planes de Hacienda. El ministro Montoro señaló que «el proyecto del Gobierno es desarrollar su programa. De ahí que tomemos medidas como bajar el IRPF en esta legislatura, que hemos concertado con el grupo político que dio su apoyo explícito a la investidura, Ciudadanos».

A continuación, especificó un poco más uno de sus principales proyectos en materia tributaria, al decir que quieren «introducir cambios en la tributación en el IRPF a las personas que prolonguen su vida laboral, de manera que estimule que, habiendo adquirido todos los derechos, en vez de ser pensionistas puedan continuar, por el gran ahorro fiscal que supone eximirles del pago del IRPF«.

La intención manifestada por el ministro Montoro es la de bajar el IRPF, pero queda supeditada a varios límites. El primero de ellos es la estabilidad presupuestaria. Y, relacionado con ella, los compromisos en la materia alcanzados, o que se puedan alcanzar en el futuro, con la UE.

El segundo límite es el de la sostenibilidad del Estado del Bienestar. Recalca que están «haciendo un trabajo entre todos para llegar a los mayores acuerdos que garanticen la sostenibilidad y la viabilidad futura de nuestro Estado de bienestar». En relación con este objetivo son muy importantes las negociaciones entre los distintos grupos parlamentarios.

El crecimiento también condicionará el calendario y profundidad de la bajada del IRPF. Es una de las bases sobre las que se asienta la reducción del déficit y de la deuda pública. Un crecimiento menor del previsto podría postergar los planes de Hacienda. Un crecimiento más vigoroso de lo que se piensa actualmente podría anticiparlos.

El aplazamiento del IVA

El Real Decreto Ley 3/2016 trajo varias consecuencias para pymes y autónomos. Algunas de ellas se refirieron a los aplazamientos. En concreto, ya no se podrán aplazar, ni tampoco fraccionar, entre otros:

Esa medida causó malestar entre los autónomos. Hace unos días la AEAT publicó en su web un comunicado en el que manifestaba que «los autónomos podrán solicitar el aplazamiento, cualquiera que sea su importe, de su IRPF e IVA» y exponía las condiciones.

En el caso de las deudas de más de 30.000 euros se podría solicitar un aplazamiento por hasta 3 años, con prestación de garantías. Los plazos en los que se pagarían las deudas serían mensuales. En las deudas por IVA, será necesario, además, acreditar que las cuotas de IVA repercutidas no han sido pagadas.

Este último aspecto es congruente con la reforma legal. Si se demuestra que no se ha cobrado el IVA, se puede solicitar un aplazamiento.

Más dificultades de interpretación ofrece el caso de las deudas de menos de 30.000 euros. Se podrán, según el comunicado, «conceder los aplazamientos, sin garantías, hasta un máximo de 12 plazos mensuales». Finalmente, expone el comunicado que «se tramitan mediante un mecanismo automatizado de resolución».

El problema está en que la ley exige expresamente que se pruebe que no se ha cobrado el IVA. No obstante, parece que se han dado instrucciones internas para que los aplazamientos a los autónomos por IVA sean automáticos por debajo de la cifra de 30.000. El plazo máximo sería de 12 meses. En el caso de las pymes, no mencionadas en el comunicado, sería de 6 meses.

Dudas sobre los aplazamientos del IVA

Desde diversas organizaciones se manifiestan las dudas sobre los medios empleados para formalizar esta decisión. Y particularmente preocupa que la ley exige que se pruebe efectivamente que no se ha cobrado el IVA.

Se ha generado en los últimos días una cierta confusión, que motiva que el ministro y los grupos parlamentarios hayan solicitado una nueva comparecencia en el Congreso de los Diputados del propio Cristóbal Montoro para explicarlo.

Los planes de Hacienda contra la morosidad

A grandes rasgos, podemos entender la morosidad como un incumplimiento de las obligaciones en el plazo establecido. Pero también existen clientes con los que se puede pactar un plazo de pago muy prolongado. No son morosos en sentido estricto, pero sí que son clientes que tardan en pagar. Y durante todo ese tiempo el proveedor les está ofreciendo una financiación de la operación, normalmente gratuita.

Anteriormente a su comparecencia en el Senado, Cristóbal Montoro ya había comparecido en el Congreso de los Diputados. El día 12 de enero lo hizo ante su Comisión de Hacienda y Función Pública. En esa comparecencia indicó que «no es aceptable que, con la Ley de morosidad vigente, se esté produciendo un abuso por parte las empresas de mayor tamaño a la hora de forzar condiciones de financiación a pequeñas empresas»

Dicha ley, en su artículo 4.3 establece:

«Los plazos de pago indicados en los apartados anteriores podrán ser ampliados mediante pacto de las partes sin que, en ningún caso, se pueda acordar un plazo superior a 60 días naturales.»

Cumpliéndose la ley, las empresas deberían cobrar sus facturas antes de los dos meses. Pero, particularmente entre las pymes y los autónomos, es práctica habitual ofrecer un plazo de cobro mayor. El objetivo es mantener o conseguir un cliente.

El ministro avanzó que «el Gobierno sí puede actuar utilizando, por ejemplo, penalizaciones en materia tributaria.» En este sentido, las principales dudas se refieren a saber cuándo y cómo lo hará y a quién van dirigidas las penalizaciones.

Éstos son tres de los planes de Hacienda que pueden tener impacto en los ratios financieros a corto plazo de pymes y autónomos. También pueden influir en los resultados de estas empresas y en la forma de afrontar la jubilación de los autónomos.