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Comprar un dominio de Internet para tu negocio es muy fácil

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El negocio en Internet es uno de los «trending topics» en el sector empresarial español. La presencia en el canal online facilita la captación de negocio, expandiendo las fronteras de la empresa por el ciberespacio, tanto a nivel nacional como internacional y permite establecer nuevas fuentes de ingresos, a través del comercio electrónico.

El primer paso en el mundo online debe ser siempre la compra de un nombre de dominio, alrededor del cual girará todo el universo de la marca del negocio en la red de redes. En esta entrada, explicaremos algunos consejos sobre la compra y gestión de los dominios de la empresa en Internet.

Elegir un buen nombre de dominio

A la hora de comprar un dominio en Internet, es necesario seguir una serie de pasos bastante sencillos. Lo primero que hay que hacer es elegir el nombre o nombres que se desean registrar. Lo ideal es preparar una lista con todos posibles nombres, ordenándolos por orden de preferencia, teniendo en cuenta que si se quiere lograr un buen posicionamiento en buscadores con la ayuda del dominio, es interesante elegir uno que lleve palabras clave que se quieran promocionar. Por ejemplo, para un hotel, puede ser interesante incluir la palabra hotel en el nombre de dominio.

El número de caracteres que tenga el nombre de dominio a registrar es importante tenerlo en cuenta, siendo los nombres más largos los más difíciles de recordar y de teclear para los usuarios. Un mal nombre, por largo y complejo, impactará en el negocio negativamente. Un nombre que suene bien, corto (lo bueno, si breve…), que sea fácil de recordar, cuya pronunciación sea similar a su escritura en el país donde se vaya a usar (ojo anglicismos y empresas con negocio internacional), alejado de modas pasajeras (no ayuda gran cosa poner un año, «pepito2000.com»), será mucho mejor para el negocio.

Al nombre del dominio, es importante tener en cuenta la extensión que va a llevar, que puede ser .com, .net, .org, .es, y otras de la lista de posibles. Para un negocio de una pyme, pensar en registrar el dominio con extensiones .es y .com es un buen punto de partida, pudiendo extender el registro a los de extensión .org y .net para proteger la marca. La extensión del dominio también afecta a nivel de posicionamiento en buscadores (SEO), siendo el .com y el .es los que mejor funcionarán en España. Elegir una extensión poco frecuente, puede llevar a equívocos (la gente recuerda mucho mejor el .com o el .es) y a dar una imagen de poca seriedad y profesionalidad.

A continuación, toca proceder a comprobar la disponibilidad de cada uno de los nombres deseados en alguno de los múltiples servicios que informan de los que están libres y los que no. Hay que ir con ojo y sólo usar servicios fiables, ya que hay algunas páginas malintencionadas que se dedican a registrar aquellos que se buscan a través de su sistema. Para la extensión .es, se puede usar el de el organismo nacional regulador de los dominios .es, que es nic.es y para el resto de extensiones, puede optarse por el de un proveedor como Dinahosting o Arsys.

En caso de que se quiera contratar un nombre de dominio que esté ocupado, se puede recurrir al contacto con el propietario, para proponerle la compra del mismo; también a los sistemas de subastas de dominios, donde se pueden encontrar nombres registrados que están a la venta, eso sí, pagando una cantidad que puede ir desde unos pocos dólares, a una buena suma de dinero, en función del atractivo que tenga. A veces nos puede interesar a nosotros comprar para proteger una marca que tengamos registrada y así evitar que otros puedan ocuparla con alguna mala práctica (spam, promover mala imagen de nuestro negocio, etc).

Hay que tener cuidado si se van a elegir dominios en países exóticos. Por ejemplo el de Libia (.ly) está muy de moda, pero al ser éste un país muy inestable a nivel político y tecnológico, puede dejar de estar disponible el servicio de un día para otro, con el impacto negativo correspondiente que esto supondría para el negocio.

¿Qué proveedor se debe elegir para comprar un dominio?

Hay infinidad de proveedores para registrar un dominio. A priori, cualquiera puede valer, tanto a nivel nacional como internacional, aunque como en todo, lo barato puede salir caro y hay que ser prudente a la hora de comprar. Siempre hay que leer las condiciones del contrato que se vaya a firmar para la compra y alojamiento del dominio y sus consecuencias (período de permanencia del dominio, servicios disponibles, coste de renovación, etc.).

En algunos casos particulares, cuando se quieran registrar extensiones internacionales, habrá que acudir a un intermediario especializado o hacer la gestión directamente con algún proveedor del país correspondiente. Ojo cuando se elige comprar en proveedores de dominios extranjeros, ya que el servicio de atención al cliente puede no estar disponible en castellano, resultando difícil y caro comunicarse (llamada internacional).

Conceptos que se pagan al registrar un dominio

En la factura de registro de un dominio, los proveedores suelen incluir los siguientes conceptos:

  • Coste del dominio: depende de la extensión del dominio y del proveedor, pudiendo variar desde apenas un euro, hasta los 100 euros o más. Ojo con los que son muy baratos, ya que pueden serlo en el momento de la compra y suponer un desembolso mayor al cabo de un tiempo, por la renovación y otros servicios.
  • Servicios relacionados: si se contrata algún servicio relacionado como alojamiento del dominio, protección de la titularidad (whois) o espacio web.
  • Impuestos: la compra de dominios en España está sujeta al pago de IVA del 21%.
  • Coste de renovación anticipado: a veces se paga por anticipado el coste de renovación del dominio para un período de tiempo determinado. Un consejo en este sentido es no cegarse con las ofertas sólo porque permiten ahorrar unos pocos euros en períodos de tiempo muy largos.

El dominio se debe renovar cada cierto tiempo, lo cual también conlleva un coste. Es conveniente ponerse una alerta en la agenda para no olvidarse y proceder a la renovación dentro del plazo establecido. El proveedor suele enviar un email para recordarlo, pero puede que hayamos cambiado de dirección de correo o que se pierda en la bandeja de entrada. Si se pasa la fecha exacta, hay un período de gracia de unas pocas semanas desde la fecha de caducidad, durante el cual queda bloqueado para que nadie lo pueda comprar y el legítimo dueño lo pueda recuperar.