9 puntos clave a tener en cuenta al abrir una empresa
Hoy voy a abrir una empresa, son las 7:30 de la mañana, después de desayunar un café con leche, los nervios no me permiten nada más, rumbo al futuro, un nuevo negocio me espera. Aparco el coche a unos metros de la empresa, voy a abrir la puerta y se me caen las llaves, las recojo, abro, entro y desactivo la alarma. Esta rutina, con más o menos desayuno, más o menos nervios, desplazamiento al nuevo negocio en otros medios de transporte, y lo de la caída de llaves, quizás solo me pase a mi, se repitió en el año 2014 unas 86.846 veces, que son el número de sociedades mercantiles que se abrieron el año pasado (un 0,84% menos que en el ejercicio de 2013).
Atrás queda un duro trabajo de tramites para la apertura, el desarrollo del modelo de negocio, la elección del tipo de sociedad, la elección de un negocio con escalabilidad, la elaboración del presupuesto de tesorería, la elección del local del negocio, la forma de financiar los activos, los proceso de selección de personal y la elección del programa de gestión y contabilidad.
El plan de empresa y la elección del modelo de negocio
La elaboración de un plan de empresa, la determinación del DAFO y la elección del modelo de negocio de la empresa son puntos de transcendental importancia. El modelo de negocio debe incluir desde la oferta de productos y servicios, el cliente al que va dirigido la oferta, cómo se va a vender, con qué recursos financieros y humanos se cuenta, etc.
La elección del tipo de sociedad
Mejor solo o acompañado, esta cuestión determinará si constituimos una sociedad con otros socios, o por contra emprendemos el proyecto como autónomos o con una sociedad limitada unipersonal.
En función del capital también podríamos constituir una Sociedad Anónima si entre los socios se pueden aportar 60.000 euros, o si solo disponemos de 3.000 euros tendremos que conformarnos con una Sociedad de Responsabilidad Limitada.
La acotación de la responsabilidad también es un factor clave si queremos limitar la responsabilidad del empresario, ya que por ejemplo, el autónomo tiene responsabilidad ilimitada y responde con todos sus bienes.
Barajando, responsabilidad, número de socios y capital debemos elegir la forma societaria que se adapte más a nuestras circunstancias.
La elección del programa de gestión y contabilidad
Para la correcta gestión de un negocio es fundamental contar con un software de gestión y contabilidad fiable, elección que debe considerarse como una inversión, no como un gasto y que tiene una gran importancia, ya que una mala elección puede dificultar la gestión y la operativa de la empresa. En Sage existen en amplio abanico de opciones en función del tipo de negocio y sus necesidades.
La escalabilidad del negocio
La escalabilidad permite hacer crecer el beneficio empresarial, sin incrementar en la misma proporción los costes de los recursos empleados. Si vamos a abrir una empresa y no tenemos claro que negocio emprender, busquemos uno con escalabilidad, ya que por el contrario, si para vender más necesitamos más personal, más infraestructura, unos gastos fijos y variables que aumentan, etc., el incremento de ventas puede que no sea suficiente para absorber todos esos costes, de manera que vender más no sólo no signifique ganar más, sino que incluso pueda suponer entrar en pérdidas.
Elaboración de un presupuesto de tesorería
Hay muchos negocios que perecen, ya al poco de nacer, por no contar con un presupuesto de tesorería realista que permita determinar que recursos necesitamos para afrontar los pagos.
La elección de como financiar los activos
Si financiamos por ejemplo activos fijos o no corrientes con una póliza de crédito, ¿que pasará si al vencimiento de la póliza el banco no nos la renueva?. La correcta elección de la forma de financiación de los activos y el seguimiento del fondo de maniobra es un punto critico en cualquier negocio.
¿Local en propiedad o en alquiler?
Decisión esta muy importante, ya que condicionara la rentabilidad del negocio. En el caso de la adquisición de un local, puede suponer un desembolso importante de recursos, que pueden ser vitales para los primeros meses del negocio. No olvidemos que el banco nos puede financiar solo en torno al 60% del valor de la tasación del inmueble.
La ubicación del local del negocios
De nada nos valdrá abrir una empresa en un local cuyo alquiler sea barato, pero no sea una calle con transito, ya que puede que no salga más rentable pagar más en una calle muy transitada. Por otra parte, de nada nos valdrá estar en la mejor calle comercial, si por las características del negocio es imposible generar ventas suficientes para poder pagar el alquiler.
La selección del personal
La elección de los mejores profesionales para la gestión del negocio, supondrá lanzarse a la mar con marineros expertos, que sepan mantener el rumbo y lidiar con las tempestades, o por contra si nos equivocamos, con una tripulación que al mínimo problema deje al capitán solo al timón rumbo a los arrecifes, sin motor ni timón. Además, estamos de suerte, ya que la crisis y el elevado paro, permiten escoger excelentes profesionales a precios razonables.