Tecnología e Innovación

La innovación en cuatro procesos empresariales

Sage

La innovación es una de las grandes claves de la competitividad, por lo que introducirlas en los procesos clave de las empresas puede ser fundamental para impulsarlas. Esto es especialmente relevante a la hora de agilizar los procesos que se lleven a cabo en la cadena de valor descrita por Michael Porter.

Entendamos que la innovación no es un producto exclusivo de la tecnología sino también del propio factor humano, cuya principal arma es la creatividad ¿En qué cuatro procesos debemos innovar y cómo? Algunos piensan que innovar consiste en cambiar el mundo, pero esto solo nos enfrenta a la frustración.

Recursos Humanos

La innovación de una empresa debe partir de la buena gestión de sus Recursos Humanos, mediante la adopción de tecnologías informativas y de gestión que permita mantener un buen control de productividad y, por tanto, un buen sistema de incentivos.

¿Por qué no permitir que los trabajadores puedan ver cómo avanzan respecto a sus objetivos en tiempo real? La barrera puede ser meramente tecnológica, sin obviar la importancia de que la empresa tenga la voluntad de hacerlo. Crear una cultura de mejora continua comienza por un empresario comprometido.

Igualmente, tenemos que lograr una buena higiene administrativa, que garantice los pagos de nóminas a tiempo y que establezca procedimientos para solucionar los problemas que pueda surgirle al personal. Ahora bien, si queremos ir más allá, podemos introducir nuevas fórmulas de gratificación, como beneficios sociales para los empleados (dar incentivos con horas o días libres, facilitarles espacios de descanso o de libertad creativa, etc…).

Aún así, todo esto no sería posible sin la mayor innovación de todos: la cultura empresarial. Hay que hacer que la creatividad sea un valor en alza, valorando la opinión de los trabajadores y creando vías de comunicación eficientes. Podemos tener lo último en el control de asistencia o la mejor aplicación de gestión de nóminas, pero la verdadera innovación llegará con un equipo motivado creativo y comprometido.

Marketing

Innovar en la forma en que colocar nuestra marca en un mercado cada vez más feroz es una de las cosas más complicadas, pero también de las más efectivas. No tenemos que pensar en revolucionar el mundo, sino de analizar nuestro sector y hacer cosas que los demás no hacen o que no realizan de la forma adecuada.

Lánzate a nuevos medios, sorprende (Acuarius ha lanzado una campaña a favor de los buenos políticos), establece una comunicación diferente, utiliza el marketing «experiencial» (ahora McDonalds se ha sumado al carro), muestra por qué eres diferente, escucha y trata de promocionar aquello que realmente quiere el mercado.

Distribución

Los sistemas de distribución de productos dentro y fuera de la empresa son clave a la hora de satisfacer a los clientes. Al hablar de ello no se puede olvidar mencionar a Ikea, que logró una verdadera revolución económica y de servicios al ofrecer paquetes de muebles fácilmente montables, que a su vez reducían el espacio necesario para su almacenamiento y distribución.

Para innovar debemos pensar ¿qué se está haciendo ahora? ¿qué están haciendo los demás? ¿hay una mejor manera de hacerlo? Puede que uno de los cambios por los que podamos luchar sea sobre los plazos de entrega, pudiéndonos centrar en los pasos que se siguen, para así pensar en qué cambios se pueden introducir para mejorar el resultado final.

No podemos obviar cómo y dónde se produce el almacenamiento, la gestión del stock, la forma de mover las mercancías, cómo se produce la entrega a puntos de distribución, la forma en que estos presentan los productos, etc… Todo esto dependerá mucho del tipo de negocio del que estemos hablando.

Ventas

Introducir cambios en los procesos de venta puede ser esencial en estos momentos. Abrir vías online (teniendo muy en cuenta los posibles problemas derivados de la mala gestión del punto anterior), establecer cambios en los puntos de venta, introducir software de gestión de ventas con los que controlar y reducir los costes por operación, crear ofertas atractivas, etc…

La creatividad de los vendedores nos puede ayudar a mejorar en este área, y en ocasiones lo que necesitamos es algo tan básico como formar a los vendedores para que ofrezcan un mejor servicio. Con algo tan sencillo como esto se pueden marcar diferencias…

No pidamos sonrisas a los empleados, en su lugar deberíamos fomentar el buen humor y la alegría. Esto solo es posible si se da lo que se pide y si se crea un ambiente de trabajo agradable donde todos remen en la misma dirección. ¿Quién dijo que innovar era complicado? Con pequeños pasos se comienzan grandes viajes.