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Así ayuda la nube a que los autónomos disfruten de más tiempo de vacaciones

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Las vacaciones de los autónomos muchas veces no son más que un fin de semana largo en medio del verano. En algunos casos se debe a que no generan suficientes ingresos a lo largo del año como para estar parados sin facturar durante quince días. En otras ocasiones, aunque económicamente son viables, lo cierto es que no se puede dejar abandonados a los clientes. Es en este segundo caso cuando trabajar en la nube nos ayuda a poder disfrutar de más tiempo de vacaciones.

Es este miedo a perder clientes importantes el que tradicionalmente nos ha atado a la oficina durante el verano, aunque con horario reducido y una bajada de la actividad, pero sin poder marcharnos. Esto al final supone una gran frustración. Se saca el poco trabajo que se tiene adelante, se procura organizar y adelantar, pero se aprovecha poco.

Las vacaciones de los autónomos no son una utopía

Las vacaciones de los autónomos no son una utopía. Muchas empresas podrían sacar este trabajo que tienen durante todo el año sin problemas con un par de horas de trabajo máximo en caso de necesidad. En muchos casos lo que se hace es anticipar el trabajo, para tener dos semanas de descanso en verano.

Si el trabajo está hecho, lo único que nos retiene, en la mayoría de las ocasiones, es mantener el contacto con los clientes y el miedo a perderlos si nos vamos de vacaciones. Pero, actualmente, esto no debería representar mayor problema, ya que la relación empresa-cliente se mantiene activa a través del teléfono móvil, mensajería instantánea o correo electrónico. Y lo podemos gestionar desde cualquier lugar. El único inconveniente sería la gestión de las urgencias.

Cómo puede ayudar la nube a un autónomo

Y esto es relativo, ya que, muchas veces, las urgencias de los clientes no son tales. Son peticiones que podrían esperar en su mayor parte a la vuelta de vacaciones. A veces es fácil reconducir la situación, clamar a nuestro interlocutor con una simple llamada telefónica. En otras, no tanto, y requieren una intervención inmediata antes de que el problema se haga más grande.

Es en estos casos donde disponer de nuestras herramientas de trabajo en la nube es fundamental. Esto nos permite, simplemente con un portátil o una tablet y conexión a Internet, poder realizar el trabajo que nos han solicitado desde cualquier lugar. Basta con utilizar nuestra propia conexión de datos del teléfono móvil para acceder a Internet y tomar medidas de forma inmediata ante una urgencia.

Otras veces no es una urgencia, sino más bien que revisemos algo que se hizo hace tiempo. No es necesariamentealgo que pare el mundo, pero no quieren esperar un par de semanas a nuestra vuelta de vacaciones. Poder acceder a todos los datos de nuestros clientes desde cualquier lugar simplemente conectándonos a nuestras herramientas online, facilita mucho este trabajo. El cliente queda satisfecho y nosotros seguimos con nuestro descanso.

El descanso activo y el peligro de no desconectar

Tener la tranquilidad de poder solventar cualquier inconveniente nos permite alargar esos días de vacaciones y disfrutar con la familia o los amigos del tiempo libre sin tener que quedarnos en la oficina. En muchos casos es un descanso activo. Se tiene que trabajar un par de horas al día y no se puede parar. Pero nosotros elegimos el momento. Basta con madrugar un poco, mientras los demás descansan para dejar todo listo y disfrutar del resto del día.

Quizás el mayor inconveniente sea tener que estar pegado al teléfono. Lo ideal sería poder desconectar para pasar de un descanso activo a una desconexión total que nos ayude a cargar las pilas. Pero esto no es siempre posible. El autónomo no podrá desviar el teléfono a un compañero, como ocurriría en una empresa.

Es complicado asumir que la nube y las comunicaciones nos permiten disfrutar de vacaciones, pero a la vez las pueden interrumpir. Si pensamos en la alternativa, sentados en la oficina mientras el resto del mundo está disfrutando de la playa, de la montaña, etcétera, seguro que una llamada, un mensaje o conectarnos a la nube para solventar un problema no nos parece tan mal.

Coworking y centros de trabajo, el salvavidas que te ayuda para tener la infraestructura que necesitas

El único inconveniente que podemos sufrir es si la conexión a Internet es deficiente en nuestro lugar de vacaciones. Y un trabajo que no nos llevaría más de un par de horas se puede alargar en el tiempo si tenemos mala cobertura o desconexiones. Vemos que todo va muy lento.

En estos casos, siempre podemos buscar un coworking o un centro de trabajo donde trabajar un par de días. Esto es de gran ayuda si, además, necesitamos concentrarnos en el trabajo que tenemos que hacer. Muchas veces no es fácil hacerlo en nuestro lugar de vacaciones, donde no vamos a tener la privacidad necesaria y nos interrumpen de forma constante.

Es un fastidio, pero desplazarse una mañana a un coworking o un centro de empresas cercano para trabajar es mucho más práctico que tener que volver a la oficina para solventar el problema que ha surgido. Además, en estos centros muchas veces tenemos la infraestructura que necesitamos en un momento dado, como impresoras, salas de reuniones o videoconferencias o servicios como una secretaría virtual, que nos ayudan a desconectar mejor durante el día y que harán que no echemos nada de menos respecto al trabajo en nuestro despacho habitual.