Apoyo a la innovación tecnológica: La SETT y los proyectos emergentes de digitalización

En este contenido, te contamos cómo la SETT pretende contribuir a la digitalización y la innovación tecnológica en la economía española. Se trata de una entidad pública empresarial que busca coordinar recursos que se hallaban dispersos.

• La SETT nace fruto de una transformación de la SEMyS.
• Los objetivos de la SETT trascienden el ámbito de los semiconductores.

La Sociedad Española para la Transformación Tecnológica (SETT) está llamada a tener cierto protagonismo en la digitalización y la innovación tecnológica en España. Es la carta que está jugando el Estado para propulsar de forma coordinada todo el conjunto del sistema.

¡COMPARTE! ¿Has oído hablar de la SETT? Toma nota de cuál será su papel en la promoción de la digitalización y la innovación tecnológica en España.

Hasta el momento, había cierta dispersión de medios. La innovación tecnológica es una cuestión transversal que afecta a diversos departamentos administrativos, que tienen la digitalización como una de sus prioridades. Ahora, se pretende coordinar recursos para aprovechar las sinergias.

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La SETT más allá de los semiconductores

En principio, la SETT nacerá de la mano de la transformación de una sociedad mercantil estatal, la Sociedad Estatal de Microelectrónica y Semiconductores (SEMyS), en una entidad pública empresarial. Para ello, el primer paso será la próxima publicación de un real decreto que concrete las bases de esta operación. 

El cambio tiene diferentes facetas:

• La forma jurídica será diferente. Eso implicará, entre otros aspectos, que la SETT podrá ejercer con normalidad potestades administrativas. Por ejemplo, podrá calificar cuándo se supone que un determinado aspecto de un proyecto encaja dentro de los conceptos que citan las normas. Detrás de este tipo de trabajos, habrá aspectos técnicos y financieros, pero también una resolución jurídica.
• El ámbito de actuación va a trascender el Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica de Microelectrónica y Semiconductores (coloquialmente, PERTE chip). En palabras del ministro Escrivá en el Senado “va a ejecutar el desarrollo del PERTE Chip, es decir, del ecosistema industrial asociado a los semiconductores, va a apoyar a las empresas nacientes, a las startups y a las scaleups desde el Fondo Next Tech y también va a apoyar y promover el sector audiovisual.”
• Los medios materiales, intangibles y humanos serán mayores que los que ha venido teniendo la SEMyS. Llegarán, además, de otros organismos en los que se hallaban dispersos. En cierto modo, la SETT centralizará gran parte de la colaboración público-privada en materia digital. 

Más allá de los semiconductores, la innovación tecnológica en materia de digitalización y el sector audiovisual serán los principales focos de atención de la SETT.

Las áreas de trabajo de la SETT

En principio, los tres principales campos serán:

• El PERTE Chip, que está orientado a los semiconductores. Se prevé que movilice 27 000 millones de euros hasta 2027. Intenta reforzar la capacidad científica, la estrategia de diseño, la construcción de plantas de fabricación y la industria de fabricación TIC. 
• Next Tech, un fondo en el que el Instituto de Crédito Oficial se encuentra entre sus participantes. Pretende movilizar hasta 4 000 millones de euros en colaboración público-privada relacionada con el emprendimiento y la escalabilidad de proyectos en nuevas tecnologías de digitalización.
• El Fondo Audiovisual, que se dota de 1 700 millones de euros. Se entiende que el audiovisual es un ámbito en el que España tiene fortalezas y que genera mucho empleo y actividad.

Cómo pretende la SETT apoyar la digitalización y la innovación tecnológica

Habrá fondos e impulso de proyectos, pero eso exigirá el criterio técnico en dos aspectos clave:

• La auditoría tecnológica de los proyectos. Hay que abordar la forma en la que se relaciona con la innovación una empresa candidata a participar de una financiación u otra intervención de la SETT. También es interesante para controlar el propio desarrollo de las iniciativas planteadas.
• Los aspectos financieros. Esto es especialmente importante para las empresas emergentes. Sus características hacen que sus expectativas y riesgos sean diferentes a los de otro negocio cualquiera. La SETT tendrá que saber manejar muy bien los datos contables de empresas emergentes y extraer conclusiones que guíen la participación de la nueva entidad pública empresarial en los proyectos. Al mismo tiempo, debe saber encauzar las deficiencias financieras de las que puedan adolecer.

Cómo puede afectar la SETT al ecosistema innovador digital

En principio, parece que marcará un poco el ‘terreno de juego’. Los criterios que fije la SETT harán que determinadas líneas de innovación crezcan, al menos, en recursos. No solo se trata de que haya un dinero público, sino también de que, a su alrededor, proveedores, clientes empresariales, inversores y otras partes interesadas fijen sus miradas sobre el punto de atención señalado.

De todos modos, el impacto no solo debe ser sectorial, sino también procedimental. Se supone que la SETT se va a centrar en ámbitos de innovación digitales donde el ecosistema empresarial español tiene ventajas. Sin embargo, en estos, va a pretender introducir mejoras técnicas y de gestión. 

Más allá de ello, las empresas innovadoras digitales tendrán que aprender a convivir con un concepto de soberanía o autonomía estratégica. En estos momentos, es difícil precisar en qué se va a traducir en cada momento, pero se vislumbra un futuro en el que la geoestrategia va a marcar bastante las decisiones de la SETT.

Por tanto, las empresas innovadoras digitales deberán prestar atención a la SETT en dos aspectos principales:

• Una repercusión directa. Tendrán que analizar cómo funcionará la SETT y qué requisitos puede pedirles en posibles iniciativas de ayuda o colaboración que puedan llegar a ser de su interés.
• Una repercusión indirecta. El hecho de que otros participen en proyectos de la SETT propiciará un impacto en demanda, costes, riesgos, amenazas, oportunidades, etcétera. 

En definitiva, la digitalización tiene un componente de medidas públicas que, en parte, se va a encarnar en la SETT. No obstante, habrá que ver cómo encajan estas iniciativas con el ecosistema privado de innovación tecnológica y con otras medidas en la materia de diferentes administraciones.