Medición del impacto sostenible: Cómo la IA evalúa y mejora la formación corporativa
¿Estás pensando en poner en marcha un programa de sostenibilidad en tu empresa? Descubre 5 usos de la inteligencia artificial.
Cada vez más conscientes de su responsabilidad social y ambiental, las empresas están invirtiendo en programas de formación. Pero, ahora, tienen el reto de medir y optimizar el impacto de esas iniciativas. Descubre qué papel puede desempeñar la inteligencia artificial en la formación corporativa.
- La sostenibilidad ocupa un lugar protagónico en muchas agendas organizacionales. El 66% de las compañías del IBEX 35 ya evalúa a sus proveedores aplicando criterios sociales y el 71% sigue criterios ambientales, según el ICEX.
- La inteligencia artificial podría ser una excelente aliada para valorar el alcance de las iniciativas sostenibles en la formación corporativa y optimizar esos programas de capacitación.
En España, el 77% de los directivos incrementó sus inversiones sostenibles en 2022, de acuerdo con Deloitte. Ese dato demuestra que el compromiso medioambiental se ha convertido en un pilar esencial de la estrategia empresarial, pero no basta con implementar iniciativas sostenibles, es necesario medir su impacto. En ese contexto, la inteligencia artificial (IA) podría usarse para evaluar la efectividad de los programas de formación en sostenibilidad y responsabilidad social corporativa (RSC).
¡COMPARTE! No basta con implementar programas de sostenibilidad, necesitas medir su impacto. Descubre cómo te ayudará la IA.
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Evaluar el impacto de la formación en sostenibilidad, una necesidad ineludible
La RSC implica un compromiso consciente de las organizaciones por desarrollar su actividad de una manera ética y sostenible. Va más allá de cumplir los reglamentos y las leyes vigentes para incluir iniciativas voluntarias destinadas a mejorar la calidad de vida de los trabajadores, las comunidades y la sociedad en general, así como proteger el medio ambiente.
Los programas de formación en sostenibilidad son esenciales para reforzar la RSC y alinear las acciones de la plantilla con los objetivos medioambientales y sociales de la empresa. Sin embargo, muchas organizaciones tienen dificultades para medir el impacto de esas iniciativas. La falta de herramientas de evaluación adecuadas puede conducir a implementar programas ineficaces, desperdiciar recursos o incluso perder oportunidades para mejorar el desempeño empresarial.
La aplicación de la inteligencia artificial en la formación corporativa permite comprender mejor cómo esos programas influyen en el comportamiento de los trabajadores y, por ende, en los resultados de la empresa.
Analizar el impacto de las acciones sostenibles sigue siendo una asignatura pendiente: en pleno 2024, el 45% de las organizaciones todavía no mide ni evalúa su contribución a los ODS, como señaló el informe “Implantación de la agenda 2030 en las empresas españolas”.
Cinco aplicaciones de la inteligencia artificial en la formación corporativa
Las empresas no solo necesitan soluciones ágiles para la gestión del capital humano, como Sage HR, también deben evaluar el impacto de sus planes formativos. La IA, gracias a sus algoritmos avanzados y herramientas de análisis de datos, puede procesar una gran cantidad de información proveniente de diversas fuentes. Así identifica patrones y tendencias que pasan desapercibidos para los métodos estadísticos tradicionales y permiten optimizar los programas de formación.
1. Análisis de sentimiento
Mediante la minería de opiniones, la IA analiza el lenguaje utilizado en encuestas y comentarios para determinar cómo se sienten los trabajadores respecto a las iniciativas de sostenibilidad. Identifica las actitudes positivas o negativas, así como las áreas de mejora o resistencia. Por ejemplo, si después de un módulo de formación sobre reducción de la huella de carbono, la IA detecta un tono predominantemente negativo, podría indicar que los empleados consideran el contenido poco relevante o difícil de aplicar en su trabajo, por lo que sería necesario ajustar la formación o aclarar los procedimientos y prácticas empresariales.
2. Seguimiento de métricas clave
La inteligencia artificial en la formación corporativa puede rastrear el progreso de los empleados en tiempo real en relación con los objetivos específicos de sostenibilidad. Eso proporcionará una visión clara de la eficacia de los programas y permitirá introducir los cambios que sean necesarios para alcanzar los objetivos medioambientales.
3. Evaluación automatizada
La IA se puede emplear para desarrollar sistemas de evaluación automatizados que midan el conocimiento que han adquirido los empleados en el programa y su aplicación a lo largo del tiempo. Podría generar evaluaciones dinámicas, monitorear el progreso y analizar el rendimiento proporcionando a cada empleado una retroalimentación en tiempo real que promueva un aprendizaje más profundo y duradero. En una compañía que opere en diferentes regiones con distintas regulaciones ambientales. También podría simular dilemas éticos sobre el desarrollo y la sostenibilidad empresarial o aplicar evaluaciones regulares sobre la gestión de residuos o la eficiencia energética.
4. Análisis predictivo
La IA también podría predecir cómo algunos cambios en el programa de formación influirían en los resultados de la empresa de cara al futuro. De esta forma sería posible maximizar el retorno de la inversión de los programas de formación en sostenibilidad.
5. Formación personalizada
Una de las grandes ventajas de la IA es su capacidad para personalizar el proceso de aprendizaje. A través de algoritmos de recomendación es posible adaptar el contenido a las necesidades específicas de cada trabajador para maximizar el impacto del programa. Si una persona muestra un interés o necesidad en prácticas de reciclaje, la IA puede recomendarle módulos de formación adicionales o presentarle casos de estudio relevantes. Ese enfoque personalizado mejora la eficacia de la formación, potencia la motivación y aumenta el compromiso de los empleados.
En pocas palabras, las empresas ya pueden utilizar la inteligencia artificial en la formación corporativa para saber cómo los programas en sostenibilidad influyen en el comportamiento de sus empleados, valorando aspectos como la reducción de desperdicios, el ahorro de energía o la adopción de prácticas laborales más sostenibles.