Cinco cosas que mejoran el rendimiento de los empleados y que muchas empresas olvidan

La típica relación que se establece entre trabajador y empresa supone el intercambio de trabajo por capital, pero también de más cosas que muchas empresas no acaban de ver. Aparte del ingreso de la nómina a final de mes, la colaboración de una persona que dedica su tiempo y esfuerzo requiere ciertas cosas que no tienen que ver con lo material, sino más bien con lo personal.

En la entrada de hoy, vamos a ver cinco cosas que valoran los empleados y que provocan que mejore notablemente su rendimiento, pero que muchas empresas prefieren no tener en cuenta.

Flexibilidad laboral

La flexibilidad laboral facilita la conciliación, poner en práctica aficiones y formarse en distintas materias. Un empleado feliz con su vida, que ve satisfechas sus necesidades con la familia, que pone en práctica sus aficiones y que progresa con sus conocimientos a lo largo de su vida, es una persona fidelizada por la empresa.

Las personas que tienen tiempo para poder hacer algo después de su jornada de trabajo, son más felices y rinden mejor. La vuelta a la jornada al día siguiente es mucho más llevadera y la jornada de trabajo no es una muralla infranqueable que hay que saltar cada día.

Beneficios sociales

Los beneficios sociales son esa parte del salario en especie que se entrega a los trabajadores para que puedan vivir más tranquilos y optar a beneficios fiscales. Por ejemplo, acceder a una buena póliza de seguro médico sin coste para el empleado, puede suponer tanto como una subida de salario.

Al negociar de forma colectiva la póliza, se pueden conseguir mayores ventajas que si las personas lo hacen individualmente; o conseguir que no se apliquen los períodos de carencia o preexistencia para algunas enfermedades o lesiones. Los cheques restaurante son otra opción, dadas las ventajas fiscales que tienen para los usuarios de estos sistemas de pago.

Teletrabajo

El teletrabajo no es algo trivial, pero trae consigo una serie de ventajas importantes para las organizaciones que lo implantan. Por ejemplo, el teletrabajo permite conciliar la vida personal y profesional de los trabajadores, ahorrar costes de desplazamiento al centro de trabajo y poder desempeñar su función en un entorno más personal.

No todos los perfiles y puestos son aptos para el teletrabajo y hay ocasiones en las que se requiere realizar tareas en el centro de trabajo. Sin embargo, poder elegir entre trabajar en casa o desplazarse a la oficina, es algo que las personas valoran y que tiene un efecto positivo en su rendimiento.

Reconocimiento

El reconocimiento es una de las formas de remuneración no dineraria más necesaria en la empresa. Si una persona no ve reconocido su esfuerzo a lo largo del tiempo, tiene una alta probabilidad de acabar «quemado» y seguramente se acabará buscando la vida puertas afuera de la empresa.

El talento hay que aprovecharlo y el reconocimiento del mismo es uno de los pilares fundamentales para lograrlo. Si se quiere conseguir lo mejor de cada persona a lo largo del tiempo, el reconocimiento de su buena labor debe hacerse de diferentes maneras. Por ejemplo, poniendo en conocimiento del resto de personas de la empresa los logros conseguidos y retos superados, ajustando su salario al alza de acuerdo con los méritos alcanzados y actualizando su rol para que pueda desarrollar una carrera dentro de la empresa.

Formación

Las personas necesitan formarse durante toda la vida a lo largo de su carrera. Por mucho que se haya pasado por la mejor universidad en kilómetros a la redonda, la sociedad avanza y los cambios que se producen afectan al entorno profesional y deben ser asimilados por las personas.

La empresa debe ser partícipe de este proceso formativo, poniendo los medios y facilidades necesarios para que las personas que trabajan en ella puedan tener a su alcance una formación. Esto significa que deben aplicar una jornada de trabajo que permita acceder a formación de calidad y pagar aquella que sea de interés para su negocio.