La Ley de Startups en España: Retos y oportunidades para el ecosistema emprendedor

Te contamos cuál es la situación del ecosistema español de empresas emergentes tras la aprobación de la Ley de Startups.

• Los próximos meses vivirán un frenético proceso de certificación de empresas emergentes.
• La transferencia del conocimiento será uno de los retos críticos para el éxito de la Ley de Startups.

La Ley de Startups está alcanzando una de sus etapas más decisivas. Tras la concreción de requisitos en una orden ministerial, ENISA comenzará a certificar empresas emergentes. Se esperan muchas solicitudes en pocos meses.

Con ese motivo, y tras la reciente aprobación del texto, Innovaspain celebró un desayuno informativo moderado por su responsable de Proyectos, María Lacalle. En él, han participado José Bayón, CEO de Enisa; Nuria Marcos, directora general de PONS IP; Iñigo Laucirica, gestor de inversiones en Samaipata y Carlos Mateo, presidente de la Asociación Española de Startups. Veamos en qué punto estamos y qué se transmitió en dicho encuentro.

¡COMPARTE! ¿Cómo está el ecosistema de empresas emergentes español tras la Ley de Startups? ¡Toma nota!

El arranque de la Ley de Startups

La Ley de Startups salió publicada en el BOE el 22 de diciembre de 2022. A la jornada siguiente, entró en vigor todo su texto. Suponía, hasta cierto punto, el fin de un primer trayecto. Cristalizaba así un largo proceso de tramitación en el que se ha optado por un enfoque colaborativo. Eso se ha manifestado en las conversaciones con diferentes sectores implicados y, ya una vez redactado el proyecto, en las aportaciones de los grupos parlamentarios.

José Bayón, en el desayuno de Innovaspain, explicaba que uno de los objetivos principales era lanzar el mensaje de que España tiene una estrategia de promoción del ecosistema startup. Para ello, los cuatro principales ejes han sido:

• Una definición jurídica de lo que es una startup. Esto nos llevará al proceso de certificación ante ENISA, que estudiará si una empresa cumple o no los requisitos para considerarse emergente.
• Cambios e innovaciones regulatorias en diferentes ámbitos, como sandbox, compra pública innovadora o las startups de estudiantes, entre otros.
• Un intento de simplificación de trámites.
• El marco de incentivos fiscales. 

En la tramitación parlamentaria, las principales controversias han girado en torno a este último eje. Ha habido diferentes posiciones tanto sobre la suficiencia o no de los incentivos para promocionar el ecosistema startup como sobre su impacto recaudatorio. 

Cómo lo valoran startups y fondos

En general, estos dos importantes sectores implicados han recibido la Ley de Startups con satisfacción con matices. En el desayuno de Innovaspain se apuntaron algunos:

• Carlos Mateo saluda la decisión de contar con ENISA para la certificación, por su experiencia y porque entiende bien qué es la innovación. Sin embargo, entiende que algunos requisitos pueden ser demasiado restrictivos. Entre ellos, cita los de antigüedad, volumen de negocio o porcentaje de la plantilla en España.
• Iñigo Laucirica se felicita del equilibrio que entiende que la ley ha aportado a la tributación de los fondos. No obstante, observa que la regulación de las stock options puede contener algunas deficiencias que induzcan al temor a su uso en ciertos empleados o empresas.

La cuestión de la protección de la propiedad intelectual e industrial

Este es uno de los aspectos clave en el marco regulatorio del ecosistema de empresas emergentes. Sin embargo, no es uno de los ejes de la Ley de Startups. Es claro que la nueva norma no aspira a ser un código que contenga toda la legislación sobre startups. Lo ejemplifica muy bien el desarrollo paralelo de otros importantes proyectos como:

• La Ley de Ciencia.
• El plan de transferencia de transferencia y colaboración.
• La Ley Crea y Crece.

En todo caso, la protección de la propiedad intelectual e industrial es un campo muy decisivo para el sector, como ha insistido la moderadora del desayuno, María Lacalle. En ese sentido, Nuria Marcos realizó dos valoraciones:

• Es razonable que no se haya introducido una reforma de la legislación sobre propiedad intelectual e industrial en la Ley de Startups. Al fin y al cabo, existe una regulación armonizada a nivel internacional.
• Defiende que hay que generar una cultura de la protección. Eso puede incluir una patente, pero también una secuencia de otros mecanismos, como un protocolo de secreto, por ejemplo. El primer paso, en todo caso, es identificar los elementos valiosos que cada empresa emergente posea.

Siempre el talento

No es ningún secreto que la gestión del talento es uno de los factores más importantes en el desarrollo del ecosistema de empresas emergentes. En realidad, lo es para cualquier ámbito empresarial y, por supuesto, las startups no solo no son una excepción, sino que son uno de los exponentes principales de este principio. 

Lo que sucede es que el talento startup tiene requerimientos complejos:

• Una sólida base científica, bien formada y puesta al día.
• Sentido práctico, con un conocimiento profundo de cómo la ingeniería va moviendo sus propias fronteras del conocimiento.
• Capacidad para el diseño de planes y proyectos y para el control de los procesos.
• Habilidades expositivas.
• Comprensión del marco jurídico presente y previsto en España y en otros territorios.
• Sensibilidad para la detección y análisis de los cambios en el entorno.
• Una productiva red de contactos y destrezas para las relaciones personales y la colaboración.
• Entendimiento de la dimensión estratégica de las decisiones y de la importancia de la secuencia temporal en el impacto financiero.
• Visión, experiencia y cultura internacionales. 
• Predisposición flexible y proactiva a la adaptación a las necesidades de sostenibilidad social y ambiental.
• Dotes de liderazgo. 

Por eso, uno de los objetivos importantes de la Ley de Startups ha sido la atracción, retención y fidelización del talento. En el desayuno, José Bayón y Carlos Mateo han puesto como ejemplo a Estonia, un país que, en pocos años, ha dado un salto muy importante en startups. Aunque, al comienzo, puede que no destacase por su cultura empresarial, José Bayón apunta que sí lo hacía por su base científica, que ha sido una de las claves de su éxito.

Finalmente, existe un deseo compartido: que esta ley estimule el ecosistema startup español y que eso se traduzca en beneficios para nuestra sociedad.