En este post te contamos qué gastos deducibles puedes aplicar si trabajas en casa como autónomo y qué aspectos debes tener en cuenta para desgravarlos.
- ¿Es posible deducirse lo que pagas de internet o de luz si trabajas en remoto desde tu hogar? Es una de las preguntas que se hacen los autónomos.
- Descubre los gastos que te puedes deducir si eres un autónomo teletrabajador y realizas la actividad desde tu propia casa.
Muchos autónomos y microempresarios realizan su trabajo desde casa por elección o porque no necesitan una oficina o un local. Este es el caso de numerosos profesionales independientes, como psicólogos, arquitectos, abogados, procuradores, diseñadores y periodistas, entre otros.
En todos estos supuestos el lugar en el que se vive y el centro de trabajo es el mismo, por lo que existen diversos gastos que derivan de elementos que se pueden utilizar para la actividad que se desarrolle y para uso personal: electricidad, internet, teléfono móvil y agua, entre otros. Tener muy claro qué se puede deducir evitará problemas con Hacienda como inspecciones y sanciones.
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Definición de gastos deducibles
La normativa fiscal considera como gastos deducibles para los autónomos los que reúnen varios requisitos:
- Que sean necesarios e imprescindibles para desempeñar una actividad profesional o empresarial.
- Que estén debidamente justificados con facturas, tiques o recibos.
- Que estén contabilizados.
Como consecuencia de lo anterior, es fundamental que guardes todos los justificantes de los gastos que realices y que los registres en tu contabilidad. Además, es fundamental que hayas notificado a Hacienda mediante los modelos 036 o 037 que realizas tu actividad desde tu casa.
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¿Qué gastos son deducibles para un autónomo que teletrabaje?
A continuación, analizamos qué ocurre con los gastos más habituales si teletrabajas por cuenta propia.
Gastos en vivienda
Se diferencian dos situaciones:
- Si tienes la vivienda en propiedad, podrás deducirte, en la proporción que corresponda, los gastos de comunidad, los intereses de la hipoteca o los impuestos relacionados como el IBI.
- Si tienes la vivienda arrendada, podrás deducirte el alquiler en la parte proporcional de la vivienda que utilices para tu actividad, pero deberás tener dos contratos: uno de vivienda y otro de uso distinto al de vivienda que irá gravado con IVA.
Teléfono móvil
Solo te lo podrás deducir si tienes dos y usas uno solo para tu trabajo.
Suministros
Es uno de los aspectos más polémicos. Actualmente, puedes deducirte hasta un 30% del importe de los suministros, calculado sobre el porcentaje de tu vivienda que dediques a tu actividad profesional.
Material de oficina
El material de oficina, los softwares y los ordenadores también son deducibles siempre que los utilices para tu negocio.
Asesorías y abogados
Los importes que pagues a asesorías fiscales o laborales, así como los que abones a otros profesionales como notarios, abogados, procuradores o registradores de la propiedad, serán deducibles si se relacionan con tu actividad.
Restauración y hostelería
Si no pernoctas, podrás deducirte 26,67 euros al día (48 euros, si es en el extranjero) y con pernocta 53,34 euros al día en España y 91,35 euros fuera de nuestro país.
Impuestos
Te podrás deducir impuestos como el IBI o el IAE, pero no las multas o sanciones. En el caso del IVA, te podrás deducir en el IRPF el que no sea desgravable en las declaraciones del IVA.
Formación
Si realizas un curso, un máster o algún tipo de formación que esté relacionada con tu actividad también podrás deducirte el importe. Lo mismo ocurre con eventos, revistas a las que te suscribas o libros que compres.
Vehículo
Solo te podrás deducir el 100% del gasto (gasolina, seguro o mantenimiento) si te dedicas a actividades de transporte. En el resto de los casos, solo te podrás deducir un 50% en el IVA.
¡Recuerda! Para que un gasto sea deducible debe de ser imprescindible para tu actividad, estar justificado y contabilizado.
Correlación de ingresos y gastos: una cuestión de sentido común
La deducibilidad de los gastos va íntimamente relacionada con los ingresos. Es decir, no puedes deducirte 6.000 euros de gastos si tienes 3.000 euros de ingresos.
Es posible que, de forma puntual, realices un gasto más elevado, pero es importante tener cuidado con los gastos que te deduces y actuar con sentido común. Por ejemplo, si haces un viaje a Barcelona para reunirte con un cliente, comer con él y luego se inicia una relación comercial, los gastos de dicho viaje serían deducibles y justificables. Sin embargo, si te vas a París una semana con tu familia, el gasto no será fiscalmente deducibles.
En definitiva, trabajar desde tu casa como autónomo tiene ventajas, pero, es importante ser precavido y conocer las normas fiscales antes de deducirte gastos que pueden ser dudosos o difíciles de justificar en cuanto a su relación con tu actividad.
Nota del editor: Este artículo fue publicado con anterioridad y actualizado a 2024 por su relevancia.
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